Esperando Que Vuelva
Todo este tiempo, Mark no estaba en la ciudad. Como siempre, estaba viajando, haciendo sus fotos. El momento fue propicio para aquella descubierta inesperada, así que Sara pudo reunir sus fuerzas. Primero pensó en matarlo, después en perdonarlo, para entonces llegar a la conclusión que no era la hora de decidir nada. Cuando Mark volviera, tendrían una discusión y sin dudas se divorciarían. Era cuestión de tiempo, hasta el día siguiente, cuando Mark estaría presente y podría escuchar todas las quejas de su mujer traicionada.
Sueños Y Pesadillas
Sara tuvo una noche horrible. Tuvo que medicarse con antidepresivos, pues no lograría cerrar los ojos en aquel estado mental. Y aún así, bajo el efecto de una potente medicina, no tuvo paz. Sus sueños eran agitados, una mezcla de todo lo que había vivido con Mark hasta aquel momento: el día en el cual se conocieron, los primeros encuentros, el viaje a la playa, las bodas. Todas sus memorias se mezclaban con escenas irreales, en las cuales disputaba el amor del marido con la mujer desconocida que vio en las fotos. Entre sueños y pesadillas, Sara empezaba a aceptar la idea del divorcio.