Esperando El Marido
Al día siguiente, al despertar, Sara se sintió lista para enfrentar la difícil situación en la cual se encontraba. Salió con sus hijos y los llevó a la escuela, sin mencionar nada. Pero los niños notaron que su madre estaba demasiado callada, fría y triste. Era como si hubiera una nube negra en su rostro. De manera casi automática, Sara dijo adiós a los hijos y volvió a su casa, donde hablaría con Mark ni bien el marido volviera del viaje. Unas horas después, llega Mark.
Esperando El Marido
Ciega Por Las Emociones
Mark llega a casa con una sonrisa en el rostro, lo que enfureció a Sara. La mujer estaba segura de que esta sonrisa estaba relacionada con su vida al lado de una amante. Tenía pruebas irrefutables de esto, bastaba consultar la computadora del marido. Y no, esta vez no aceptaría sus excusas y solicitaría el divorcio. Mark se quedó sin palabras y con miedo de su esposa, que parecía ciega por sus emociones. Al mismo tiempo, intentaba explicarse y hacer con que Sara comprendera la situación.
Ciega Por Las Emociones
